Una de las principales virtudes de la versión original de The Witcher era el hecho de que las decisiones tomadas en un segmento temprano de la aventura podían repercurtir a largo plazo en la historia gracias a un sistema de moralidad gris y consecuencias indirectas. Esta virtud (y novedad con respecto a otros juegos del género) también dirá presente en esta versión para consolas, con varias mejoras significativas.
Otros apartados de la jugabilidad también están siendo modificados, o mejor dicho, adaptados a las posibilidades de las consolas com por ejemplo los movimientos a realizarse en los combates que podrán ejecutarse sin mayores problemas utilizándose el pad, combinándose tan sólo un par de botones para realizar los más diversos combos. Incluso para utilizar magia será necesario apretar no más que un par de botones.
Estas aparentes simplificaciones estarán acompañadas de una interfaz totalmente renovada, algo en extremo necesario para paliar la ausencia del mouse (ratón) y el teclado que de una manera u otra se extrañan al principio del juego (porque luego uno se acostumbra).
Respecto al apartado gráfico, cabe destacar que fue creado y realizado totalmente desde cero lo que da un buen indicio de que la gente de CDProjekt se está tomando las cosas muy en serio y está trabajando en un juego que muy probablemente no defraudará a los usuarios.
Todavía faltan algunos meses de desarrollo, pero ya estamos seguros de que no estaremos en presencia de un mero port, sino de un juego renovado, incluso mejorado en varios aspectos. Lo que ya de por sí es mucho decir.