Varios han sido los intentos de combinar el género estratégico con el de acción en primera persona, habiéndose logrado resultados más o menos exitosos. Pueden citarse varios ejemplos, pero en un caso paradigmático es sin dudas el de Savage: The Battle for Newerth, proyecto donde pudieron combinarse dos géneros tan disímiles de forma eficiente y, en especial, muy divertida.
El caso que pasaremos a revisar a continuación es el de Raven Squad: Operation Hidden Dagger, actual título en desarrollo de la compañía húngara Atomic Games, que promete retomar estos conceptos de fusión de géneros para dar luz a un producto por demás interesante.
Cuando el juego fue presentado en sociedad, allá por mediados del pasado año, todo parecía indicar que se trataría de un FPS más del montón. En un video mostrado durante la Game Developers Conference 08, un grupo de paracaidistas se lanzaban de un avión para caer en medio de una jungla y comenzar una misión. Esta secuencia no planteaba cuestiones de mayor complejidad… hasta que se introducían otros elementos que ya daban la pauta de que estábamos en presencia de un proyecto poco usual.
Para empezar, el jugador podrá controlar distintos grupos de unidades que se ubicarán en sectores aislados del mapa. Dentro de estos grupos, cada soldado en particular podrá controlarse durante cualquier momento del combate, pudiendo intercambiar el control de los mismos presionando tan sólo un botón.
Las órdenes a las tropas pertenecientes al mismo escuadrón se podrán dar de forma sencilla, generando una respuesta inmediata. Pero también en cualquier momento de la misión se podrá acceder a un mapa en tres dimensiones, donde el jugador podrá dar órdenes a los distintos grupos de unidades como si se tratase de un juego de estrategia en tiempo real.
El buen uso de esta combinación constante entre perspectivas, mecánicas y unidades, será vital para completar las misiones. Algunos objetivos demandarán una compleja planificación, debiendo emboscar a un pelotón enemigo en un sector del mapa mientras defendemos una base militar en otro.
Esta combinación de géneros, sumada a unos gráficos que se antojan interesantes de movida y un modo multijugador que incluirá una modalidad cooperativa, logran que depositemos bastantes expectativas con respecto a este juego que, por lo visto, parece prometer. Habrá que ver si una compañía no del todo experimentada como esta logra resolver de forma correcta una cuestión tan delicada como el mix de géneros.
Poco hay para destacar en lo que respecta al apartado sonoro. Buena música que en casi todo momento se fusiona perfectamente con las distintas situaciones del título. Decimos casi porque de vez en cuando se vuelve repetitiva y puede cansar. Los efectos al igual que las voces (en inglés) son acordes, denotan variedad y calidad.
Se ha visto de todo en lo que respecta a juegos híbridos de géneros. Algunos se destacaron y otros resultaron ser una verdadera porquería, esperemos que Raven Squad integre el primer grupo.Seguramente antes de fin de año tendremos la posibilidad de comprobar hasta qué punto han logrado llevar a buen puerto su compañía.
