Una apuesta en fuerte de EA GAMES, que evolucionó el género e instalo un nuevo, adquiriendo sus propias características. Burnout fue una saga que nació en la anterior generación de consolas, que tuvo sus primeros pasos en PlayStation 2, Game Cube y X-BOX, es decir, en las 3 consolas de la competencia al momento de la salida de juego. Luego, se dejaría de lanzar para la consola de Nintendo, mientras que mantendría su fidelidad para la consola de SONY, dónde el juego tuvo las mejores ventas y el mejor nivel de aceptación. Hoy por hoy ya tiene versiones para la nueva generación de consolas, como está que vamos a analizar en unos instantes, que salió para X-BOX 360, y también, la siguiente versión, Dominador, saldría para dicha consola. Pero dejemos los preámbulos de lado y pasemos a analizar esta versión, Revenge, la cuarta de la saga, que por muchas razones, resulta la mejor, especialmente para PlayStation 2.
Burnout: Revenge
(Género: Carreras)
A lo largo de sus versiones, la saga se ha caracterizado por poseer dos pilares muy importantes y que caracterizaron a toda la misma: el primero, su gran potencial técnico, siendo este incluso tan impresionante que hacía dudar a más de uno de las verdaderas capacidades del Hardware de PS2, y el segundo, su dinamismo. Cuando digo dinamismo me refiero a su vertiginosidad y a su capacidad de hacer divertir al jugador, de transmitirle esa espectacular sensación de velocidad al jugador de una manera muy eficaz.