Los “spin-off” de exitosas franquicias, por lo general vienen con el sello de “mediocridad” estampado en su caja. Contados casos son los que han logrado ser decentes como el producto original. A menudo, este tipo de juegos terminan luciendo como vanos intentos por lucrar un poco más con el nombre de una franquicia, sin que importe mucho el respeto a su base de seguidores.
En este marco aparece Dissidia: Final Fantasy, un título de peleas 3D basado en los distintos universos del RPG más famoso del mundo, que afortunadamente viene estampado con el sello de calidad característico de Square Enix.
La historia nos plantea al Dios del Caos siendo liberado, y a la Diosa del Cosmos llamando a 10 de los mejores luchadores de la historia, para conseguir 10 cristales que servirán para derrotar al enemigo. Por su parte, el Caos llama a sus 10 luchadores, y entonces podemos decir “que comience la batalla”.
Este conjunto de héroes y villanos corresponden a leyendas en la historia de la franquicia, como Cloud, Zidane, Squall, Sephiroth o Kefka. Lo bueno es que con cada luchador tendremos un modo historia extenso, que nos llevará por el destino de ese personaje para cumplir con su objetivo, todo presentado con animaciones de manera soberbia.
No se preocupen aquellos que no sean fanáticos de los RPGs, porque las historias de cada personaje no requieren de un conocimiento previo, y simplemente dan paso a los combates, que es donde reside la diversión.
Los combates se podrían catalogar como los clásicos de 1 vs 1, con la gran particularidad de que dispondremos de dos tipos de ataques, los de “HP”, y los de “Bravery”. Los primeros simplemente atacan a la barra de energía del oponente, mientras que los segundos atacan a la “bravura” del oponente, lo que los hace más débiles a los ataques de HP.
Aunque al principio no parezca, se terminan generando estrategias elaboradas para acabar con el rival, donde constantemente se intercambiarán los diferentes ataques, o se debilitará al máximo las defensas del oponente, desencadenando ataques a toda escala.
Completa el paquete de combos ataques especiales que potencian las habilidades de un luchador y que culminan, como no puede ser de otra manera, en enormes poderes especiales.
También referido a las batallas, hay que decir que los escenarios son grandes lo que permite que se den lugar las épicas batallas que en su momento cautivaron a miles de jugadores en el mundo. Sin embargo, el movimiento de cámara no siempre es el deseado y llega a molestar, a veces, hasta el hartazgo.
Como descendiente de un exitoso RPG, Dissidia involucra experiencia en sus combates, la que acumulada por los luchadores, representa en mejoras a las habilidades del mismo, como así también nuevo equipamiento para utlizar, aunque en defintiva se nota que termina siendo secundario y no una implementación tan seria como hubieramos querido que sea.
En resumen, sin ser la octava maravilla, su sencillo pero efectivo sistema de combate, y las extensas horas de diversión (sin contar al multijugador) hacen de este Dissidia: Final Fantasy uno de los mejores títulos del año para PSP, uno que fanáticos de la franquicia no pueden bajo ningún concepto dejar pasar por alto, y otro que aquellos simplemente deseosos de probar un muy divertido juego de peleas tampoco deberían obviar.
Juegoconsolas le otorga a Dissidia: Final Fantasy un 8.
