Análisis: Harry Potter and the Half-Blood Prince

Quienes hallan ido a ver al cine la última película de Harry Potter, no podrán negar la enorme calidad de film (más allá de que falten cosas del libro y otras sean inventadas). Sin lugar a dudas entre las mejores tres de la saga del aprendiz de mago  

Por desgracia no podemos decir lo mismo del videojuego, basado enteramente en las película, ya que su adaptación no llega a estar a la altura de sus contrapartida en celuloide.

Harry Potter and the Half-Blood Prince, como videojuego, es una vergüenza. El estilo de juego podría considerarse “abierto”, ya que el jugador puede recorrer a gusto y placer la escuela de Hogwarts (calcada de la entrega anterior). Sin embargo el título es bastante lineal. 

Imagínense jugar una secuela de Grand Theft Auto IV, en la misma ciudad, con los mismos gráficos y sin que se haya producido un mínimo cambio. Incluso hasta parece que ha habido una involución audiovisual, porque no recordamos que las versiones previas se hayan visto tan, pero tan mal. Los modelos de los personajes dejan bastante que desear en consolas que se destacan justamente por ofrecer lo más avanzado en gráficos. Incluso el sonido da lástima, ya que los actores reales no han prestado sus voces y las que hay son muy pobres. 

Sabemos que lo descripto en el párrafo precedente no caerá bien a todos los lectores, sobre todo a los acérrimos fanáticos de la saga, pero tenemos que decirles que justamente por tratrse de un producto que lleva el nombre de Harry Potter merecería un mínimo de calidad (de la cual carece). Es que da la sensación de que sus desarrolladores se tomaron a la ligera el trabajo ya que «va a vender por ser Harry».

Quizas todos los defectos mencionados no hubiesen tomado tanto revuelo si el juego contara una grata jugabilidad, minimamente  innovadora. Lamentablemente esto sucede, ya que ninguna de las tres mecánicas  que componen al título cumplen con el cometido de entretener.

La primera de mecánica de juego es un clon de Cooking Mama (de inferior calidad) pero adaptado al universo creado por Rowling, debiendo el jugador mezclar ingredientes para crear pócimas. Quienes no hayan jugado el título mencionado en DS o Wii, quizá puedan disfrutar un poco más estas partes del juego.

Por otro lado tenemos los partidos de Quidditch que son un desastre. Prácticamente con un par de botones será posible realizar todos los movimientos. Un deporte tan adrenalínico en los libros y las películas aqui es entretenido como preparar un té en saquito.

La última de la tres es la de los duelos de varitas quizá el punto más fuerte del juego, más que nada en multijugador, pero que en definitiva se trata de una modalidad carente de profundidad.

No queda mucho más para decir de esta pobre adaptación: repetitiva, poco innovadora. Incluso la historia esta mal contada. Lo mejor del título es que se pueda recorrer Hogwarts libremente. Los duelos de varitas no estan mal pero se podría haber innovado un poco.  Duele decirlo pero Harry Potter and the Half-Blood Prince no es un buen juego.

Juecoconsolas le otorga a Harry Potter and the Half-Blood Prince un 4.