Para poder hacer frente a las horrendas criaturas que aparecerán en Cursed Mountain contaremos con las enseñanzas de un viejo chamán, por lo que se imaginarán que no abundarán las armas de fuego en el juego. La forma de derrotar a estas almas en pena será bastante original, ya que se deberán realizar ciertas combinaciones de movimientos con los controles en una sucesión de eventos en tiempo real.
Un interesante agregado puede ser la inclusión de soporte para Wii MotionPlus, el periférico que otorga mayor sensibilidad al Wiimote.
De todos modos está claro que el juego no se limitará al combate contra espíritus, debiendo el jugador investigar, dialogar y hasta resolver enigmas para así encontrar datos sobre el paradero de su hermano perdido. Además de tener que escalar la montaña de tanto en tanto.
El apartado gráfico es uno de los puntos más altos del juego y, por qué no, de todo el catálogo disponible para la consola. El principal objetivo de los desarrolladores es captar lo más fielmente posible la ambientación de la zona, en especial la sensación que produce el ir subiendo una montaña, con las respectivas modificaciones en el paisaje.
Cuando el jugador se introduce al Bardo, la pantalla se tornará más oscura (ya que, recordemos que es como un especio siniestro) y estará cubierta del clásico efecto ruido, como para hacer más tenebrosas estas escenas.
De todos modos, Cursed Mountain aún no tiene fecha de lanzamiento definitivo, quedando al parecer mucha tela para cortar. Con un poco de suerte, podremos escalar los montes tibetanos antes de que termine el corriente año.